Adiós mi floripondia, que después de mucho esfuerzo y años de anhelo, pude comprar.
Luego de mucho trabajo y cariño, se transformó en una bella y estilizada kombi.

Ahora después de una conversación con la almohada, y un cuasi divorcio, se va nuestra querida “MATILDE”.
Para mi tranquilidad, se la adjudicó un vecino, por lo tanto la veo todas las tardes.

Pero no todo son malas noticias… Así como van, llegan (en este caso).
Por lo tanto espero con ansias, mi nueva kombi … la cual pretendo cuidar, y regalonear tanto como se pueda….

No hay comentarios:
Publicar un comentario